¿Quieres aprender a hablar en público?

La Oratoria es la capacidad que tienen las personas para expresarse  verbalmente. Suele ser una facultad que algunos desarrollan naturalmente, mientras que a otras personas les resulta algo un poco más complejo, porque no es sólo saber decir las cosas, sino saberse presentar ante una audiencia, saber exponer con certeza y serenidad los argumentos necesarios para entablar una conversación o una negociación y saber transmitir seguridad en la propuesta, entre otras cosas.

Si esta capacidad se desarrolla tempranamente, se estará formando con toda seguridad un profesional que sabrá defender proyectos, hacer propuestas académicas o de negocios y un líder en el ámbito que le corresponda desarrollarse.

Por eso hemos pensado en presentarle a los jóvenes un TALLER DE ORATORIA , que busca despertar en ellos el deseo de mostrarse como líderes jóvenes convincentes, y lo mejor es que realmente lo que se requiere es el deseo de comenzar a hablar! Si eres tímido, ésta es tu oportunidad para mostrarte al mundo tal como siempre has deseado.

Se llevará a cabo en Reto´s Grupo Educativo por espacio de tres (3) sábados consecutivos, comenzando el próximo 19 de marzo y culminando el 2 de abril. Contáctanos para mayor información.

Anímate, y aprende a expresarte para que no dependas de otros que lo hagan por ti!

Lic.Ma. Angélica Villota

NOS APROXIMAMOS AL ÚLTIMO LAPSO, ¿QUÉ RESULTADOS OBTUVISTE?

FIN DE AÑO ESCOLAR: ¿APROBADO?

El inicio de la fase final de cada año escolar es en algunos casos motivo de preocupación, tanto para los padres como para los propios muchachos, quienes tienen en sus manos la última oportunidad para aprobar el año escolar.

Por María Angélica Villota

LA RECTA FINAL

Son muchos los padres que comienzan en esta época del año una de las etapas con mayores expectativas e incertidumbres, pues de acuerdo al rendimiento escolar acumulado de sus hijos no tienen la certeza de saber si ellos aprobarán o no el año escolar en curso.

EL ESFUERZO DE UN EQUIPO: LA FAMILIA

Independientemente de tratarse de educación pública o privada, y del nivel que se curse, el esfuerzo que representa levantarse diariamente temprano,  tener el uniforme escolar a punto y tener listo el morral con los libros, cuadernos y tareas que se utilizarán cada día, ya implica por si mismo un  desgaste y a la vez  un esfuerzo que se debe realizar recurrentemente cada semana por espacio de los 220 días hábiles que contempla el año escolar en nuestro país. Aunado a esto y ya enfocándose específicamente en los adolescentes de bachillerato,  puede comenzar a aparecer la preocupación por saber que las calificaciones acumuladas hasta el momento están por debajo de los requerimientos para aprobar el año escolar, lo que vuelve la situación cuesta arriba para estos padres, quienes adicionalmente a los esfuerzos antes señalados, están envueltos en infinidad de compromisos laborales y familiares que requieren de su atención y que no pueden desatenderse por ayudar a sus hijos en el cumplimiento de sus deberes. En la mayoría de los casos esta preocupación viene de parte de los padres, cuando comprenden que su rol no finaliza por efectos de que sus hijos estén estudiando en bachillerato, y que por lo tanto deben seguir atendiéndolos, orientándolos y apoyándolos, pues es realmente una de las etapas más conflictivas del desarrollo del ser humano. También puede ocurrir, que esta preocupación se origine directamente en los adolescentes, quienes de forma responsable sienten que han hecho su mejor esfuerzo pero aun con eso no llegan a cumplir las exigencias escolares requeridas, y les piden ayuda a sus padres.

  

BÚSQUEDA DE SOLUCIONES

Es entonces cuando comienzan los trajines para ver qué se puede hacer para resolver una situación no deseada y eventualmente inesperada que a primera vista no se presenta fácil de resolver. Los padres sienten entonces que el entorno se vuelve negativo y el ambiente familiar se pudiera tornar hostil, pues la sensación es que los adolescentes los defraudaron y no cumplieron con los deberes que les correspondían, originando una frustración familiar por el tiempo empleado y los resultados obtenidos. En otras ocasiones, si verdaderamente la preocupación está referida a los mismos resultados, su origen pudiera ser el de una falla a nivel de concentración, motivación o de técnicas de estudio que el adolescente no está en capacidad de analizar, y que eventualmente se pudiera interpretar como una debilidad de su parte. Sea por una razón o por otra, es importante la consulta de los padres con especialistas que los orienten en descifrar las razones que originaron el problema así como la búsqueda de soluciones rápidas al mismo.

EFECTIVIDAD Y COMPROMISO

Dependiendo de cada caso, si la situación se ataja a esta altura del año escolar, es probable que recurriendo a profesionales de experiencia en el área, se puedan organizar clases extraordinarias dirigidas a recuperar las calificaciones y evitar la pérdida del año escolar. Evidentemente, es importante que los padres tengan claro que la cantidad de materias aplazadas y la actitud de sus hijos hacia el estudio intensivo, organizado y personalizado de materias que seguramente no son de su agrado, requerirá una responsabilidad y compromiso especial que serán factores claves para  el éxito de un esfuerzo que en definitiva lo hace la familia como un todo.

HAY QUE ANALIZAR  Y REENCAUZAR PROPÓSITOS

En situaciones como éstas, a pesar de que el tiempo apremie, es importante hacer un alto en el camino y reflexionar, para poder analizar cuáles han sido las razones que condujeron al cambio de rumbo de acuerdo a lo pautado para el inicio del año escolar, y sin necesidad de sacar culpables de la situación, lo importante es buscar las soluciones y tenerlas en cuenta para  oportunidades futuras. Esto no sólo les evitará dolores de cabeza a los padres, sino también momentos incómodos a sus hijos, quienes poco a poco entenderán la recompensa que trae el esfuerzo por el cumplimiento de sus deberes y la ganancia que representa los conocimientos adquiridos.

TIP 1:

Es necesario reconocer a tiempo la posibilidad de un fracaso escolar y buscar rápidamente una solución para evitarlo.

TIP 2:

El asesoramiento profesional es imprescindible para el logro de soluciones rápidas y efectivas.

CONTACTO:

Reto´s Grupo Educativo

Av. José Ma. Vargas, Ed. Ártico

PB, Locales 1 y 2

Urb. Santa Fe Norte

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PLANIFICACIÓN Y AUTOMOTIVACIÓN PARA ADOLESCENTES

Planificarse, organizarse y comprometerse son palabras que pudieran resultar difíciles de manejar para un adolescente, pero que aunque él no lo crea y eventualmente lo rechace, son pilares fundamentales para edificar exitosamente su vida presente y futura.

Por: Lic. María Angélica Villota

¿POR QUÉ PLANIFICARSE?

¡Qué bueno sería que desde que los jóvenes inician sus estudios en bachillerato aprendieran a planificarse! Con frecuencia ocurre que los adolescentes no se dan cuenta de la forma en que invierten su tiempo, malgastándolo indiscriminadamente por falta de una orientación familiar o por desconocimiento de su importancia. Desde su día a día hasta su trimestre escolar completo, incluyendo trivialidades aparentes como descansar y salir con los amigos, hasta asuntos más trascendentales como acudir al colegio, estudiar y compartir con la familia, son fundamentales organizarlos para que todos puedan estar presentes conformando la totalidad del mundo donde se desenvuelve el adolescente. La organización y distribución adecuada del tiempo le permitirá  concretar todas y cada una de las actividades que quiere y debe realizar, y a mediano plazo le dará la satisfacción del deber cumplido y la alegría de saberse capaz de haber alcanzado todas las actividades pautadas.

DEBERES  + DERECHOS  = EQUILIBRIO EMOCIONAL DEL ADOLESCENTE

Es importante comprender, tanto por los adolescentes como por sus padres, que una planificación exitosa debe incluir tanto responsabilidades como tiempo libre para desarrollar actividades recreativas y de descanso, tanto personales como compartidas con su familia y sus amigos, que equilibren adecuadamente los intereses personales, lo que propiciará la madurez y el compromiso necesario para ir ampliando la planificación semanal y trimestral, a anual, y mucho más allá, tanto así como para apuntar a visualizarse dentro de cinco, diez o 20 años, lo que con seguridad despertará en los adolescentes un anhelo por alcanzar metas planteadas por ellos y para ellos, y por ende el compromiso personal por demostrarse a sí mismos lo capaces que pueden ser cuando tienen un desafío por delante.

PLANIFICAR METAS ALCANZABLES

Desde aprender a pintar y luego a leer y a escribir, pasando por ordenar su cuarto y cumplir con sus tareas en el tiempo dispuesto, hasta descubrir cuál es la carrera que mejor se adapta a sus intereses y necesidades y hacerse profesional de ella, son metas propuestas que cuando una persona las alcanza cumplen con su autorrealización, incrementan su madurez y su auto motivación, independientemente de su edad.

Esta planificación temprana del adolescente debería incluir tópicos tales como mi persona, mis estudios, mi trabajo, mi familia, mi pareja, mis amigos, mi país y la humanidad. Esto pretende la búsqueda del análisis y el razonamiento temprano en los jóvenes, dilucidando lo que son y lo que quieren ser a futuro.

¿QUÉ CARRERA ESTUDIAR?

Este es quizás uno de los puntos más importantes y decisivos en la vida de cualquier persona, por lo que hay que evaluarlo con detenimiento y orientación profesional, pues definirá completamente sus actividades, intereses, modo de vida y trabajo a futuro, lo que no sólo lo implica a él como individuo, sino también a su familia. Para ello el conocimiento pleno de las capacidades y actitudes personales del adolescente en cuanto a sus inclinaciones científicas o humanísticas,  aunado al conocimiento de los pensum de estudios actualizados en diferentes instituciones educativas y las oportunidades de trabajo a futuro de las carreras técnicas o universitarias por las cuales muestre interés, son factores indispensables para lograr ser acertivo en la selección de la carrera a estudiar. Este conjunto de factores propicia la formación de un adulto responsable y comprometido consigo mismo, con su familia y con la sociedad, capaz de formar adecuadamente y en el momento propicio, una familia bien constituida de donde saldrán los futuros hombres y mujeres emprendedores que conformarán nuestra sociedad, fomentando en ellos la verdadera importancia de los valores éticos y morales, así como el significado individual y social que representa una óptima formación académica, que les permita como seres humanos soñar con las estrellas teniendo siempre los pies firmes en la tierra.

OBSERVACIONES FINALES...

La planificación temprana en los adolescentes, orientada por su familia en concordancia con un equipo de profesionales preparado para ello, permite la autorrealización futura de los jóvenes y por ende el descubrimiento del camino a la felicidad.

Es importante la distribución adecuada del tiempo en los adolescentes que conlleve intereses personales y familiares, de tal forma que permita que se proyecte exitosamente al futuro como un adulto prometedor para si mismo, para su familia y para la sociedad.